16.10.12

paz sin nóbeles


el campo... ¡El campo! 
Un árbol generoso y pasar la tarde leyendo bajo su sombra. 
Pajaritos (ojalá nunca destruyamos el mundo al punto que dejen de cantar los pájaros), aire que refresca y gratifica.
Y el mundo que deja de importar (sin culpas ni egoísmo), 
se deshace entre las manos, como un gran chocolate olvidado

2 comentarios:

NuMaN dijo...

Que bueno poder hacer eso!

gen71 dijo...

Comparto deseos de naturaleza descontaminante de esta ciudad/pais/mundo de la furia.

Salud, hoy mas que nunca.