24.2.11

Fugas

el mail
el facebuaj
el sms

el hastío
el silencio

y vuelta al mail
al facebuaj
la fuga

el deseo
la palabra

y vuelta a la rutina
a las fugas

el atisbo de vida
(que la vida es otra cosa)
el silencio y el deseo
(que toma fuerza)
el hastío y la palabra
(que cobra sentido)

Y por fin,
un portazo (ojalá que el mío y no mío sola)
Y los sueños del otro lado
que son verdes
perfumados
con el perfume de la luna (un perfume colgado)
con el perfume a bosta del campo (y salir a buscar hongos)
con un libro, unos seres queridos, una estufa a leña y un silencio sin hastío
con unos mates y unos vinos
y un trabajo arduo con fruto concreto (nunca garantizado)
a veces perdido
en manos de natura
a veces ganado como conquista humana
sobre nosotros mismos
sobre nuestra soberbia
sobre nuestra estupidez
sobre nuestra ceguera

***

Malditos dilemas éticos que no me dejan actuar a tiempo
Maldita moral constrictora que actúa con la voz de lo bueno
Maldita ciudad viciada y negada a su propio suelo

***
Envejezco y me vuelvo romántica conservadora.
Anhelo el campo, la naturaleza, y desprecio profundamente (una vez más, como cuando tenía 15 años y odiaba casi todo) la vida humana erigida sobre el vano edificio de la razón.

***

¿Cuántas oportunidades más nos dará la vida para dar lugar a lo que deseamos?

***

¿Será que la soledad es un invento del mundo para que nos quedemos quietos?